Cuando escucho el "After Virtue" de Wim Mertens
sé que ha llegado el momento de acallarse.
Las décadas no han pasado por sus notas,
ni la muerte ha de llegar a sus corcheas,
es domingo, la espiga se eleva, la noche se retarda,
y hubo un tiempo en que yo miraba la mar y era joven,
quería ser de ayuda y blandir mis espermátidas.
No quiero admitir que ahora me siento peor
pero títulos y tratamientos me han sabido a atardecer,
no tengo fe, no soy humilde, la caridad es un saco de espinas,
Wim Mertens ya no se escucha ni en los teatros ni en las cloacas,
y quiero ser el de antes, mirar el Talgo el sábado y creerme al otro lado,
cantar los tipos del Código Penal y pensar que todo tendría sentido,
llorar con "En lo Más Crudo del Crudo Invierno" y aullar a la luna
como sólo lo hizo Ozzy Osbourne.
Temo que algo falta en esta mixtura,
y últimamente envidio a los poetas sus tremendas palabras,
yo poco puedo añadir a la añoranza de esos viejos compasillos,
Wim Mertens ahora sabe a pasado, y el antes es un censo pleno de tachones,
un muñeco ataviado de capotes y monteras,
cinco Inter-Rails sobados con sus sellos orientales, la suiza
que me folló en Thurso sin yo saber ponerme un condón,
la carta que nunca llegó a Schenectady diciéndome "te quiero",
mi pelo creciendo contra las esperanzas de mi madre,
unas cuantas hostias en coche y un diente postizo.
Wim Mertnes cantaba a la virtud y los pescadores calaban sus redes a la noche,
yo lloraba al escuchar su sónica maldición contra el marfil de un piano,
llamaba por teléfono a tu casa y casi siempre colgaba,
el Maestral helaba las madrugadas de Cala Flores y yo me levantaba contra su ulular,
me pelé los cojones durante años frente a la Isla del Mero y aprobé las oposiciones,
Wim Mertens decidió hacernos añicos con su "Strategie de la Rupture",
y qué coño tiene un hombre sin armarios llenos de discos viejos
y de melancolía.
http://www.youtube.com/watch?v=lriPAb2Mfwk
ResponderEliminarGracias por "Justice", Joaquín. La más loable aspiración del ser humano.
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